Jesús, sabiendo...
Jesús, sabiendo que era su hora,
amó hasta el final (Juan 13:1).
Sabiendo que el Padre había puesto
todas las cosas en sus manos,
pudo entregarlo todo (Juan 13:3).
Sabiendo de dónde venía,
sabía a dónde iría.
Conociendo el contenido de la copa,
aun así la tomó (Mateo 26:39).
Sabiendo lo que tenía que cargar,
lo cargó.
No sólo hizo una milla,
hizo las dos (Mateo 5:41).
Tomando la cruz nos salvó,
aunque para eso,
todo lo dejó (Filipenses 2:6-8).
Todas las cosas viejas,
las hizo nuevas (2 Corintios 5:17).
Porque no se puede nacer de nuevo
sin dejar lo viejo atrás (Juan 3:3).
Siendo trono,
se hizo pesebre.
Siendo corona,
se hizo cruz.
Siendo promesa,
se hizo ley cumplida (Mateo 5:17).
Y habiendo amado a los suyos,
los amó hasta el fin (Juan 13:1).
Porque como estaba escrito,
Él vino
y como está escrito,
Él volverá (Hechos 1:11; Apocalipsis 22:20).
Escrito por Rubén Felix Galvano
Comentarios
Publicar un comentario